lunes, 4 de mayo de 2015

El ensanche de Madrid

Nueva aportación al blog realizada por Itziar S.

A mediados del Siglo XIX, Madrid, como capital de España, tenía unas necesidades y aspiraciones de renovación y se comenzaron a desarrollar nuevas infraestructuras. Con la llegada del ferrocarril (1851) y de las aguas del Canal de Isabel II (1852), llevaron a una buena parte de la clase política a plantear las ventajas y facilidades que traería consigo la expansión de la ciudad, razón por la que en 1860 fue aprobado el ensanche de Madrid. Tres años antes se había proyectado por el ingeniero Carlos María de Castro el Plan de Castro, que es como conocemos el Ensanche de Madrid del Siglo XIX. Este iba un suponer pasar de las 800 hectáreas de extensión que entonces tenía Madrid a nada menos que 2.294 hectáreas, es decir, ganaría Madrid 1494 hectáreas, o lo que es lo mismo su superficie sí multiplicaría por tres.

El ensanche consistía en una retícula ortogonal orientada en dirección norte-sur, que no alteraba y el crecimiento natural de ciudad en dirección hacia el Este. Presentaba las siguientes características:

  • Traslado del centro urbano de la plaza de Cibeles: la disposición de la retícula no alteraba el crecimiento natural de la Ciudad que desde la Edad Media se venía produciendo en sentido Este, si bien, el centro urbano sufrió ligero desplazamiento desde la Puerta del Sol hasta la plaza de Cibeles.
  • La manzana regular es la edificación característica del ensanche: la agrupación de manzanas regulares permite crear una retícula ortogonal con grandes calles paralelas y transversales, a la vez que permite establecer grandes espacios abiertos y plazas, como grandes edificios públicos y asistenciales. Además, la manzana regular era achaflanada por sus vértices y contaba con un gran patio interior destinado a facilitar la iluminación, la ventilación y las condiciones higiénicas de las viviendas. Sin embargo, pocas manzanas del ensanche se construyeron con estos chaflanes y patios interiores, ya que los promotores aprovecharon al máximo la superficie edificable.
  • Se establecen tres tipos de calles: las principales de 30 metros de ancho, las secundarias de 20 metros de ancho, y las más estrechas de 15 metros.
  • Se crean plazas, zonas libres y jardines. En el ensanche de Castro se da mucha importancia a la creación de espacios libres con el fin de renovar el aire y mejorar las condiciones higiénicas y sanitarias de la ciudad.
  • Delimitación del ensanche mediante un foso de segregación. Quizá este fue uno de los aspectos menos innovadores del ensanche, pues al igual que la cerca de 1625 había tenido constreñida la ciudad, el ensanche también se delimitaría con la construcción de un foso que viniera a evitar el contrabando y la evasión de impuestos municipales. Con posterioridad, sobre este foso se dispusieron las avenidas de la Reina Victoria, Raimundo Fernández de Villaverde, Joaquín Costa, Francisco Silvela y Doctor Esquerdo.
  • Zonificación residencial del ensanche en base a criterios sociales y económicos. Esta zonificación todavía se puede ver en el ensanche:
    • Los barrios del norte, a uno y otro lado de la Castellana se destinaron a las clases altas. 
    • Los de Salamanca y Chamberí a las clases medias. 
    • Tras el parque del Retiro, al sur de la calle de Alcalá, se estableció un barrio para las clases populares por sus accesos incómodos; la zona de Delicias se destinó a uso industrial y abastecimiento; para la zona de Vallehermoso se habían previsto infraestructuras militares y, por último, el sur se destinó a usos agropecuarios.

La construcción del ensanche fue lenta, se prolongó entre las décadas de 1860 y 1930, razón por la que el proyecto original sufrió numerosas alteraciones. Además, en este mismo periodo de tiempo, y junto a los barrios del ensanche, comenzaron a edificarse los nuevos barrios de Argüelles y de Alfonso XII sobre antiguos terrenos que habían pertenecido a la Corona.

La energía nuclear

Entrada realizada por Itziar S.

La energía nuclear es la energía en el núcleo de un átomo. Los átomos son las partículas más pequeñas en que se puede dividir un material. En el núcleo de cada átomo hay dos tipos de partículas (neutrones y protones) que se mantienen unidas. La energía nuclear es la energía que mantiene unidos neutrones y protones.

La energía nuclear se puede utilizar para producir electricidad. Pero primero la energía debe ser liberada. Ésta energía se puede obtener de dos formas: fusión nuclear y fisión nuclear. En la fusión nuclear, la energía se libera cuando los átomos se combinan o se fusionan entre sí para formar un átomo más grande. Así es como el Sol produce energía. En la fisión nuclear, los átomos se separan para formar átomos más pequeños, liberando energía. Las centrales nucleares utilizan la fisión nuclear para producir electricidad.

Cuando se produce una de estas dos reacciones físicas (la fisión nuclear o la fusión nuclear) los átomos experimentan una ligera pérdida de masa. Esta masa que se pierde se convierte en una gran cantidad de energía calorífica como descubrió el Albert Einstein con su famosa ecuación E=mc2.
Aunque la producción de energía eléctrica es la utilidad más habitual existen muchas otras aplicaciones de la energía nuclear en otros sectores: como en aplicaciones médicas, medioambientales, industriales o militares (bomba atómica).
           

España cuenta en la actualidad con distintas instalaciones nucleares que cubren el ciclo de combustible completo: ocho reactores nucleares, una fábrica de combustible nuclear de Juzbado (Salamanca) y un centro de almacenamiento de residuos radiactivos de baja y media actividad en El Cabril (Córdoba). La primera central nuclear en España se construyó en el 1969, fue la central nuclear José Cabrera. Todas las plantas nucleares que se construyeron en aquella época, los constructores y los ingenieros eran la misma entidad. El padre de la energía nuclear en España fue José María Otero de Navascués, que fue el director del laboratorio y Taller de Investigación del Estado Mayor de la Armada.

España y Europa: envejecimiento y esperanza de vida

Entrada realizada por Marta C. acerca de la población europea y su nivel de envejecimiento.


La Organización Mundial de la Salud fija la media de vida española en 82,2 años, las españolas llegan a los 85 años, por casi 79 de media de los hombres
España es el país con mayor expectativa de vida de toda Europa. Así lo afirma la Organización Mundial de la Salud (OMS), organismo que fija la media de vida española en 82,2 años, al tiempo que advierte que esa privilegiada posición podría cambiar según las gestiones que se                                      
Europa envejece


Algunos factores que contribuyen a alargar la vida en el continente son la mejora en el tratamiento de las enfermedades, que suelen ir ligadas a hábitos dañinos y son más frecuentes también entre las personas de bajos ingresos.

El informe indica diferencias entre hombres, que viven unos 72,5 años de media, y mujeres, que llegan a los 80, lo que se explica en parte por diferentes estilos de vida y empleo.

En España se vive muchos años pese a que, en comparación con otros países, se fuma mucho, sin embargo se «lleva unos años desarrollar las enfermedades, así que esta situación podría cambiar en el futuro».

En los 53 países, al menos un 6,5 % de las muertes son debidas al alcohol, que, con el tabaco, sigue siendo el principal factor de riesgo en el continente, pues «en Europa se fuma y se bebe más que en cualquier otro lugar del mundo»

En la presentación de su informe, la oficina europea de la OMS destacó también el envejecimiento de la población del continente, un 15 % de la cual tenía en 2010 más de 65 años, proporción que llegará al 25 % en 2050 a no ser que lleguen más inmigrantes jóvenes.

Aunque esto supone un triunfo de la medicina, por otra indica un estancamiento de la población, cifrada ahora en 900 millones de habitantes, debido «a la caída del índice de fertilidad» «Las muertes no se están sustituyendo con nacimientos», por lo que los países europeos deben hacer «lo posible» por promover medidas que faciliten a las mujeres tener bebés.


La mortalidad en Europa ha caído en general en las últimas décadas pero varía de Este, donde hay más muertes, a Oeste, debiéndose un 80 % de los fallecimientos a enfermedades como el cáncer. 

Aunque tienen menos incidencia que en otras regiones del mundo, las enfermedades infecciosas, como el sida, la tuberculosis u otras de transmisión sexual, «son aún motivo de preocupación», por lo que no se puede bajar la guardia.


Acuicultura

Entrada publicada por Carmen M.

La acuicultura es el conjunto de actividades, técnicas y conocimientos de crianza de especies acuáticas vegetales y animales. Es una importante actividad económica de producción de alimentos, materias primas de uso industrial y farmacéutico, y organismos vivos para repoblación u ornamentación.

Los sistemas de cultivo son muy diversos, de agua dulce o agua de mar, y desde el cultivo directamente en el medio hasta instalaciones bajo condiciones totalmente controladas. Los cultivos más habituales corresponden a organismos planctónicos , macroalgas, moluscos y crustáceos.

Acuicultura de moluscos bivalvos

Es la acuicultura de almejas, mejillones, ostras, vieiras y demás moluscos bivalvos, con gran importancia económica. Su origen es muy antiguo. Diversas fuentes atribuyen a Sergius Orata el inicio de la ostricultura, hacia el año 100 a. C.

Actualmente uno de los cultivos más rentables dentro de la acuicultura de moluscos gasterópodos es el cultivo del abalón que se cultiva en sistemas intensivos en estanques emplazados en tierra.

Galicia es la segunda mayor productora de mejillón cultivado del mundo (detrás de China), habiendo desarrollado las técnicas de cultivo en batea cuya tecnología se está exportando a diversos lugares del mundo. También es productora de una gran cantidad de bivalvos, lo que le confiere una diversidad productiva espectacular, debido a la excepcional peculiaridad de sus conocidas rías. Es pionera en desarrollo de cultivo acuícola, siendo junto con Japón y Noruega una de las principales potencias mundiales en el desarrollo de la acuicultura y está en la vanguardia de la investigación en este campo.

Carpicultura

Es el cultivo de la carpa común y otros Ciprínidos, especies de agua dulce no tropical. Son los cultivos acuícolas más antiguos, ya practicados por los antiguos Sumerios, Chinos y Romanos.

Salmonicultura

Es la acuicultura de Salmoniformes, tanto truchas como salmones. En el caso de la trucha, se conoce como truticultura.

La puesta y el desarrollo de larvas y alevines transcurre en agua dulce, tanto para truchas como salmones. En el caso de la trucha, se puede mantener en agua dulce hasta su tamaño comercial, o realizar el proceso de esmoltificación, al igual que en el salmón, que es una adaptación gradual al agua de mar en el que se producen importantes cambios fisiológicos.

Acuicultura de especies tropicales de agua dulce

Son cultivos de especies de peces y crustáceos tropicales y subtropicales dulceacuícolas. Los más extendidos son los cultivos de tilapia, pacú, langosta australiana y otras especies de peces y crustáceos. El cultivo de tilapia ha ido creciendo gradualmente hasta convertirse en el más importante en los países tropicales y subtropicales.

En algunos casos, estos cultivos están asociados a otras actividades agropecuarias, denominados Cultivos Integrados. En ellos se integra la producción acuícola en la producción agrícola. En el caso de los sistemas aquapónicos, el agua de cultivo se utiliza para el cultivo de vegetales de huerta, aprovechando los nutrientes minerales generados por el cultivo, y la capacidad de depuración de los vegetales.

Acuicultura marina

Cultivos de especies marinas, tanto de peces, como de algunos invertebrados, como el pulpo. Tiene una gran importancia económica. En el caso de muchas especies, la producción de cultivo casi ha sustituido por completo a las capturas pesqueras.

Algunas de las especies más importantes son el rodaballo, la dorada, la lubina, el bacalao, la corvina y la anguila. Los cultivos de otras especies aún están en desarrollo, como el pulpo, el besugo el lenguado, entre otras.

Una variante de acuicultura marina es la conocida como “engrasado de atún rojo”, que se cultiva en jaula a partir de ejemplares salvajes. Después de un proceso de engorde, se venden en el mercado japonés, donde constituyen un producto muy apreciado.

Cultivo de algas

El cultivo de algas es una forma de acuicultura que se preocupa del cultivo de especies determinadas 
de algas, cuyo cultivo cae en su mayoría dentro de las algas cultivadas, especialmente en la categoría de microalgas, entre las que se encuentran el fitoplancton, las micrófitas, etc. Su principal utilidad está en relación directa con el consumo humano y la producción de biocombustibles.

Cultivos auxiliares de acuicultura


Se denomina así a la acuicultura de microalgas y microinvertebrados17 destinados a la alimentación de otros cultivos principales, como larvas de peces o moluscos. Las especies de microalgas más conocidas son Chlorella, Isochrisis o Tetraselmis, entre otras muchas. Los cultivos auxiliares de invertebrados producen rotíferos, cladóceros, Dendrocephalus18 19 20 Thamnocephalus21 22 y Artemia salina, entre muchas otras especies donde predominan los quistes de artemia y de enriquecimiento.

Las "smart cities"

Entrada muy interesante de Marta C. sobre las "smart cities"

Las “Smart Cities” o ciudades inteligentes, son el resultado de la necesidad cada vez más imperiosa de orientar nuestra vida hacia la sostenibilidad. Así, estas ciudades se sirven de infraestructuras, innovación y tecnología para disminuir el consumo energético y reducir las emisiones de CO2.

¿En qué consisten estas medidas hacia la sostenibilidad?

Servirse de paneles fotovoltaicos en las comunidades, más medios de transporte y vehículos eléctricos, molinos eólicos en farolas, paneles solares para semáforos o señales, promoción y desarrollo del uso de bicicletas… Las “Smart Cities” utilizan variedad de recursos, y todos estos pequeños actos llevan a una ciudad a convertirse en más eficiente y sostenible.

¿Qué ciudades son las más inteligentes del mundo?

Hay diferentes parámetros por los que se valora más a una ciudad que otra. Para ello se consideran 10
dimensiones que son clave: Gobernanza, planificación urbana, gestión pública, tecnología, medioambiente, proyección internacional, cohesión social, movilidad y transporte, capital humano y economía.

Top 5 ciudades inteligentes.

Tokyo: es la ciudad que mejor situada está en el ranking de 2013, con el primer puesto en capital humano y gestión pública. Sin embargo, en cohesión social ha quedado muy relegada sobre todo por el terremoto de Fukushima y el posterior tsunami.

Londres: mantiene niveles altos en casi todas las dimensiones, y destaca especialmente en proyección internacional y tecnología. Sin embargo, en gestión pública y cohesión social tiene valores relativamente bajos.

Nueva York: es la ciudad más poblada de Estados Unidos y la segunda aglomeración urbana del continente después de México D.F. Es una de  las ciudades más importantes en cuanto a capital humano y economía del mundo.

 Zúrich: se trata de la principal ciudad de Suiza, y es el motor financiero y centro cultural del país. Destaca en las dimensiones medioambiente, y movilidad y transporte.

París: es el destino turístico más popular del mundo, superando los 40 millones de turistas extranjeros al año. Sobresale en proyección internacional, tecnología, y movilidad y transporte.

Teniendo en cuenta que la ciudad perfecta no existe, hay que caminar hacia esa perfección con
todos los medios al alcance. Por ejemplo, Tokio o Nueva York, deberían mejorar su aspecto de cohesión social. Se han de aprovechar las tecnologías de la información y las comunicaciones para mejorar, a la vez que se mantiene un compromiso con el entorno medioambiental.


Para 2050, según la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), si no se toman medidas drásticas el crecimiento económico y demográfico tendrá un impacto medioambiental y social sin precedentes. Teniendo en cuenta que la mayoría de la población se concentrará en las grandes ciudades, se hace indispensable superar el desafío de los más de 2.000 millones de habitantes adicionales para 2050.



Natalidad y mortalidad:parámetros de medición

Carlota R. nos vuelve a dejar un interesante comentario geográfico, tocando en este caso el tema de la población.

En el crecimiento de la población a escala mundial entran en juego dos factores que determinan su saldo positivo o negativo: los nacimientos y las defunciones. La diferencia entre ambos es lo que se conoce como Crecimiento Natural o Vegetativo.



Gráfico. Crecimiento natural de la población.

Natalidad.

Medición de la Natalidad.

Para medir la natalidad y poder comparar los nacimientos de unos países y otros independientemente de su tamaño o de la población total, se utilizan las Tasas de Natalidad, que representan el número de nacimientos en un periodo de tiempo determinado (normalmente anual) por cada mil habitantes de ese lugar. Para su cálculo se dividen los nacimientos de ese periodo por el número medio de habitantes del lugar durante ese periodo y se multiplica por mil. El resultado por lo tanto se expresa en Tantos por mil (%o).

TN = Nº de Nacimientos (en el periodo) x 1000 / nº medio de habitantes

Existen otras formas de medir la natalidad, como la Tasa de Fecundidad, que es número de nacidos vivos en un periodo de tiempo concreto (normalmente un año) relacionados con la cantidad de mujeres fértiles (entre 15 y 45 años) que existían durante ese periodo.

TF = Nº Nacidos vivos (en el periodo) x 1000 / nº de mujeres fértiles (15-45 años)

Este dato nos muestra el Número de hijos por mujer, que es un indicador del desarrollo de los países. Para que un país crezca se ha de dar al menos una tasa de fecundidad de 2,1; en los países desarrollados, de menor crecimiento poblacional, esta tasa se sitúa entorno al 1,5 siendo de los más bajos España, con 1,1 ó Italia y Hungría con 1,2, mientras que en los países subdesarrollados sin control de la natalidad estas tasas se disparan por encima de los 5 como en Afganistán con 6,8 o Níger con 8 (Datos de 2002).

Evolución histórica de las Tasas de Natalidad.

Hasta el siglo XVIII la tasa de natalidad era de un 35-45 %o, siendo de carácter irregular, con continuas subidas y bajadas dependientes de las catástrofes naturales (sequías, epidemias...) y sociales (guerras, crisis económicas...)
Desde mediados del siglo XVIII y a lo largo del siglo XIX, los países más desarrollados van reduciendo los periodos de caída de la natalidad y empiezan a controlar las causas que impedían el aumento de la natalidad. Por lo que en la primera mitad del siglo XIX se produce un ligero aumento de las Tasas de Natalidad y en la segunda mitad una caída continua debido a los primeros intentos de control de natalidad.
* En el siglo XX. Los países desarrollados tienen un declive muy acusado en sus tasas de natalidad debido al control de la natalidad y la planificación familiar, estancándose cuando la tasa llega entorno al 12-15 %o y variando levemente al alza o a la baja dependiendo de coyunturas económicas o sociales. Mientras tanto los subdesarrollados mantienen y aumentan sus tasas debido a la incorporación de medidas sanitarias; solamente comienzan a estabilizarse las tasas de natalidad a partir de los años 70-80 cuando la ONU desarrolla programas de control de natalidad en las zonas menos desarrolladas.

Gráfico. Evolución de las Tasas de Natalidad en los Países Desarrollados.

Factores condicionantes de la natalidad.

La variación de las tasas de natalidad tanto en el tiempo (evolución histórica) como en el espacio (distribución geográfica) se debe a la conjunción de múltiples factores entre los que podemos destacar:

a) Económicos: al relacionar el nivel de vida con las tasas de natalidad, se observa que según aumenta el desarrollo económico de los países, disminuye la tasa de natalidad. Esta observación la podemos comprobar tanto a lo largo del tiempo (ver gráfico 4) como en la actual distribución de la natalidad por países, en la que las menores tasas de natalidad se encuentran en los países más desarrollados económicamente.

b) Biológicos: aquellos países que cuentan con una alta proporción de población joven en edad de procrear tienen unos mayores niveles de natalidad.  También en aquellos lugares o grupos de población en los que la nupcialidad se realiza en edades más tempranas las tasas de natalidad son más altas dado que la mayoría de los nacimientos se dan durante el matrimonio. Por lo tanto los países menos desarrollados, en los que se suelen cumplir estas condiciones, tienen las tasas más altas de natalidad, todo lo contrario que los países desarrollados, en los que los estratos de población dominantes son los adultos y la edad de acceso al matrimonio se retrasa hasta aproximarse a los 30 años, con lo que la natalidad es menor.

c) Sociales. Dentro de una misma sociedad, no todos los grupos tienen los mismos comportamientos demográficos, así las clases altas, de mayor nivel económico y formación cultural, en los que las mujeres están completamente integradas en el mercado de trabajo en puestos directivos, etc., las tasas de natalidad son mucho menores que en las clases más bajas, en la que se accede antes al matrimonio y la mujer suele trabajar en el propio hogar al cargo de los hijos.
Otro ejemplo de este tipo de factor lo encontramos en los diferentes comportamientos demográficos existentes entre las zonas rurales, más conservadoras, en las que la mujer suele dedicarse al hogar, el acceso al matrimonio se realiza en edades más tempranas, y las zonas urbanas, en las que las condiciones de las viviendas, el acceso de la mujer al trabajo fuera de casa, etc., hacen que se controle más la natalidad.

d) Ideológicos. Importancia de las religiones pronatalistas (Islam, Cristianismo), que favorecen la procreación y rechazan cualquier medio anticonceptivo. Así en los países en los que más fuertemente están implantadas estas religiones tenemos las más altas tasas de natalidad. Así podemos indicar el caso de Irlanda, donde la religión católica está muy arraigada, las tasas de natalidad son de las más altas de la Europa desarrollada.

La ideología política característica de determinados regímenes también influyen en la natalidad como en el caso de China, en el que dependiendo del momento histórico se favoreció la natalidad (en los primeros años tras la revolución) o se controló drásticamente los nacimientos (actualmente).

Distribución geográfica de la natalidad.

Según las tasas de natalidad de los distintos países podemos delimitar tres zonas diferentes en el mundo:

a) Países con tasas de natalidad altas (más del 40 %o): son aquellos países de más bajo desarrollo económico, entre los que podemos citar los del África Negra y algunos asiáticos.
    
b) Países con tasas de natalidad intermedias (entre el 20 y el 40 %o): Son aquellos países que han iniciado la reducción de la natalidad pero que aún no han logrado estabilizarlas. Por lo general son los países en vías de desarrollo: Gran parte de Asia, el Norte de África y Latinoamérica.


c) Países con tasas de natalidad bajas (menores del 20 %o): Son los países desarrollados, que iniciaron pronto el descenso de la natalidad y hoy se encuentran con tasas estabilizadas, con ligeros altibajos coyunturales, y con tasas que no aseguran la reposición generacional. Los países con menor natalidad son los del Sur y Este de Europa.

El comercio interior en España

Nueva entrada de Javier P. En este caso sobre la organización comercial en España.

La función económica del comercio es poner en contacto la oferta y la demanda. Mientras la
producción fue artesana y, por tanto, escasa, y la demanda estuvo limitada por la escasez de las
rentas, el comercio no pudo tener la relevancia que alcanzaría luego, limitándose, en muchos
casos, a los productos de lujo o al comercio mayorista de productos alimenticios.

La revolución industrial introdujo cambios radicales: la producción masiva requería una
demanda amplia, que se extendía por espacios cada vez más extensos; la demanda, por otro
lado, comenzó a crecer al compás del progresivo aumento de las rentas.

El comercio puede ser interior, cuando se realiza dentro de un estado; el comercio tiene unas consecuencias económicas y territoriales:

Produce una especialización en aquellas actividades para las que se es más competitivo. Esta
especialización tiene consecuencias económicas ya que  ocasiona un aumento de la
producción, pero también tiene consecuencias territoriales, pues origina procesos de especialización productiva.

Ocasiona la necesidad de comunicación y contacto entre diferentes ámbitos territoriales, dando lugar a diferentes flujos e interconexiones, que, realizados a través de las ciudades, colaboran muy activamente a la formación de los sistemas urbanos y a su jerarquización. La distribución comercial es un sector de actividad muy importante desde el punto de vista económico y social, como lo demuestran datos sobre la aportación al Producto Interior Bruto (PIB) y el empleo generado.

En cuanto al PIB, es aproximadamente del 14%, manteniéndose esta aportación más o menos
constante desde 1.980. Este hecho se ha producido de forma similar en otros países miembros
de la Unión Europea. Si se comparan los datos de España con los de los países más desarrollados de la Unión Europea se observa que la participación en el PIB de la distribución comercial española se encuentra relativamente elevada (9% en Alemania y 12% en Francia),

En lo que se refiere al empleo generado por el sector, la población activa del comercio representa  alrededor del 20% de la población activa total de España y prácticamente las mismas cifras en la población ocupada El sector de la distribución comercial es en España el mayor en importancia como generador de empleo,

Es un sector enormemente complejo en cuanto a las actividades que realiza por lo que es difícil
presentar una clasificación sencilla de sus actividades

Por la posición que ocupa en la distribución, podemos hablar de:
  • Comercio mayorista o “al por mayor”

Compra los productos al fabricante o a otro mayoristas, los almacena y los vende al comercio minorista. Se localiza en lugares estratégicos respecto a las áreas productoras y consumidoras de mercancías, prefiriendo la periferia de las ciudades. Las comunidades con mayor peso de locales mayoristas son Cataluña, Andalucía y Madrid
  • Comercio minorista

Adquiere los productos al fabricante o a un mayorista y los vende directamente al consumidor. Las comunidades autónomas con mayor peso de locales minoristas son Andalucía, Cataluña y Madrid.

Tanto el comercio minorista como el mayorista empiezan a ser unos sectores de actividad importantes en España a partir de los años sesenta gracias a los movimientos migratorios, al crecimiento económico y al desarrollo del turismo, que provoca el paso de un período de comercio tradicional a un período de distribución masiva, caracterizándose por la introducción y fuerte desarrollo del sistema de venta de autoservicio.

Por los canales de distribución (producción-consumidor) que utiliza, podemos hablar de:

  • Comercio de bienes de equipo, la mayor parte de los cuales los vende directamente el productor-fabricante a las propias industrias que van a emplearlos. Para ello, el propio fabricante dispone de sus divisiones comerciales.


  • Comercio de bienes “perecederos. Los más importantes son los alimentos), que muestran un sistema muy complejo: productor-comisionista-asentador de mercado central-minorista-consumidor. Esta complejidad exige la necesidad de una cierta regulación para evitar los abusos y la especulación. Para ello, existen organismos como MERCASA Mercados Centrales de Abastecimientos S.A., holding estatal encargado de crear y administrar los mercados centrales de abastecimientos. Forman parte de él, por ejemplo, Mercazaragoza, Mercamadrid, Mercabarna, etc...


  • Comercio de bienes de consumo duradero, donde se plantean multitud de variantes, pero las más comunes son:

1) productor-minorista-consumidor;
2) productor-gran almacén-consumidor.

En la actualidad, la distribución comercial en España se caracteriza por el funcionamiento
paralelo de dos sistemas:

Un sistema basado en un comercio tradicional, caracterizado por:

- Supone el 90% del comercio al por menor
- En establecimientos de pequeña dimensión (50 m2 de media)
- Dirigidos por empresarios particulares
- Con escaso personal empleado (2,2 trabajadores por establecimiento)
- Alto porcentaje de negocio familiar (62 %)
- Con escasa formación y edad avanzada (47 años de media)
- Equipamientos deficientes porque las inversiones son bajas

Este sistema se encuentra en una situación de difícil pervivencia, que se traduce en el
progresivo cierre de este tipo de establecimientos y en una drástica pérdida de cuota de
mercado

Un sistema basado en la introducción de nuevas formas comerciales, que utilizan constantemente las innovaciones de las técnicas de
venta y de gestión, y que en general, están preparadas para poder adaptarse a los
cambios de las condiciones del entorno.
Entre estas nuevas formas comerciales destacan:

a) Autoservicios y  Supermercados. Con una superficie de sala de ventas hasta de 2.500 m2

b ) Hipermercados. Se trata de establecimientos con una superficie de venta superior a los 2.500 m2
con grandes áreas para el aparcamiento de vehículos, emplazados fuera del casco urbano de las ciudades y situados en las grandes vías de comunicación.

Generalmente se trata de grandes cadenas europeas, lo que les otorga ventajas:

Se integran en las cadenas de compra y venta europeas, buscando el producto más barato y el consumidor idóneo,
Por el volumen de sus compras pueden presionar al productor para que les ofrezca productos más baratos o sistemas de financiación óptimos.

c ) Centros Comerciales y de Ocio integrados.

Grandes áreas en las que se integran Hipermercados con otras empresas de más pequeño tamaño y oferta complementaria, y con empresas dedicadas al ocio (cines, restaurantes, etc,), buscando convertirse en lugares donde el comprador encuentre todo lo que necesita, incluidos los servicios necesarios para hacer más agradable su tiempo de compra, y donde el tiempo de ocio se mercantiliza.